Un año más, el obispo Francisco preside la Peregrinación de la Esperanza a Lourdes, que ya llega a su 46 edición y que se hace desde este martes hasta el sábado 2 de julio. Enfermos, discapacitados, enfermeras, ramaderos y peregrinos compartirán unos días de oración, servicio y ayuda ante la Virgen. En el mensaje que el obispo dirige a todos los participantes les recuerda que «este año se invita a los peregrinos a orar con el Padrenuestro añadiendo la expresión "con Bernadetta". La finalidad es que la oración, la experiencia, la vida y las acciones de la santa, la hija de María, nos ayude a comprender mejor a quien invocamos, qué pedimos, qué recibimos y qué ofrecemos cuando lo hacemos con las palabras que el propio Señor Jesús nos ha enseñado».
La peregrinación de este año lo forman 245 enfermos, otras 467 personas entre enfermeras y ramaderos, y 158 peregrinos.
21 autocares con sus respectivos guías y animadores se encargarán de su traslado desde Girona y Figueres.