Unos cincuenta chicos y chicas de entre quince y veinticinco años, procedentes de diferentes parroquias de la diócesis, han hecho camino a Taizé.
El viaje, organizado por la Delegación de Pastoral con Jóvenes, ha permitido que se encontraran con compañeros y compañeras venidos de países y experiencias distintas.
Juntos han compartido ocho días sabiendo que no están solos en la fe y en las creencias. Han podido compartir experiencias y vivencias, reflexionar, orar y prepararse para un nuevo curso.
Taizé, centro ecuménico en el corazón de la Borgoña, se ha convertido en un referente para miles de jóvenes cristianos y también de otras confesiones, de toda Europa y de más allá.