Una treintena de personas venidas de diversas parroquias de nuestra diócesis participan en la peregrinación a Tierra Santa organizada por la Delegación de Jóvenes del Obispado de Girona esta segunda semana de julio.
El pasado viernes ya pudieron empezar el recorrido desde el propio Nazaret, al que habían llegado la noche anterior. Uno de los participantes en la peregrinación comentaba en un mensaje enviado a la delegación de medios del obispado que "antes de que sonara el despertador, ya nos han despertado los cantos de la oración de la mañana, provenientes del minarete de una mezquita cercana".
Y es que había que madrugar mucho porque en estos primeros días la actividad ha sido muy intensa. Han visitado la montaña de las Bienaventuranzas, Cesarea de Felipe, el Primate de Pedro, Cafarnaún. Una de las cosas más vividas y más emotivas, según comentaron, fue la eucaristía celebrada en medio del Mar de Galilea. Este sábado han subido al Tabor. Un paro en Naim también les ha servido para recordar la escena de la resurrección del hijo de la viuda.
Este domingo, el obispo Francisco se reunirá con el grupo para acomendarlos durante el resto de días.
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