Ayer domingo de ramos, todas las parroquias de la diócesis celebraron el inicio de la Semana Santa. En la bendición de palmas y ramos que tuvo lugar frente a la plaza de los apóstoles antes de iniciar la misa solemne en el interior de la Catedral de Girona, el obispo Francesc Pardo remarcó: "no estamos aquí para encontrarnos con ningún jugador famoso de fútbol ni tampoco con una estrella del cine, sino para recibir a Jesús y darle las gracias". También aprovechó para explicar, sobre todo a los más pequeños, que los días de la semana santa no son sólo “días sin escuela”, y animó a la multitud de fieles congregados, a hacer presente el mensaje cristiano en las escuelas, hospitales, casas y calles de la ciudad de Girona. En la homilía de la misa rogó por la solidaridad entre los pueblos y en especial en Oriente Medio.