El P. Abad de Montserrat, Josep M. Soler, ha impartido esta mañana dos reflexiones en el marco del receso de inicio de la Cuaresma para presbíteros y diáconos de la diócesis de Girona.
A lo largo del retiro, que ha tenido lugar en la Casa de Espiritualidad Santa Elena de Solius, el Abad Soler ha ido desgranando el sentido de diversos "apotegmas" -silogismos y frases de la tradición monástica y de los padres del desierto-, para presentar algunas de las actitudes interiores que deben tener presentes en sus vidas los presbíteros. En este sentido, ha destacado la necesidad de anteponer a Dios a todas las cosas y de trabajar realmente la vida interior y la vida espiritual, sin las cuales el ministerio y la vida cristiana quedan resecas o sujetas a la ideología ya las simples necesidades institucionales.
En una segunda parte, el Padre Abad de Montserrat, ha seguido la encíclica Evangelii Gaudium y la carta apostólica Misera et Misericordia del papa Francisco para destacar las dimensiones misioneras que hay que cultivar en todos los ámbitos de la acción pastoral: 1) Evangelizar acortar distancias urgente para escuchar, compartir y dialogar, y 3) Celebrar compartiendo los dones que nos vienen por los sacramentos y la proclamación de la palabra.