Este segundo domingo de Pascua, como es tradicional en la Iglesia, una docena de catecúmenos de diversas parroquias de nuestra diócesis, recibieron los sacramentos de iniciación cristiana (Bautismo, Confirmación y Eucaristía), de la mano del obispo Francisco Pardo. El camino del catecumenado está espaciado en el tiempo y cuenta con diversas celebraciones y metas a lo largo del curso y del año litúrgico en las que, aquellos que quieren recibirlos, van descubriendo el significado y la experiencia de ser cristiano. Sin embargo, la celebración de los sacramentos que tuvo lugar ayer por la tarde en la Catedral es el momento culminante de todo el proceso, al que sigue un período de profundización espiritual de los dones recibidos. En medio de la alegría de la Pascua, la iglesia de Girona se alegra de acoger a estos nuevos hijos e hijas de Dios. A la celebración asistieron numerosos fieles, familiares y amigos que quisieron acompañarles en ese día tan señalado.