Con la misa solemne con motivo del 900 aniversario de la consagración de la iglesia de San Esteban de Olot el 26 de diciembre de 2017, en la que también se llevó a cabo la dedicación del altar mayor, el obispo Francesc Pardo cerró definitivamente tres años de visita pastoral al arciprestazgo del Alt Flu. A lo largo de este trienio, el obispo de Girona ha podido conocer muy a fondo la realidad de un arciprestazgo formado por cuarenta y tres parroquias y en el que se pueden distinguir hasta cuatro grandes zonas: Olot y su principal área de influencia, Vall de Bianya, Vall d'en Bas y el sector de Besalú.
También durante ese tiempo se ha producido el relevo de los rectores de la ciudad de Olot. Los dos arciprestes durante el tiempo que ha englobado la visita pastoral han sido Mn. Miquel Ramió y Mn. Pedro Doménech.
En sus notas dirigidas a los curas, religiosos ya las comunidades parroquiales del Alto Fluvia después de cerrar la visita pastoral, el obispo Francesc Pardo valora muy positivamente el papel del Casal Mariano como punto de encuentro de los presbíteros del arciprestazgo, que favorece el trabajo en común y la posibilidad de compartir el día a día.
En la primera parte del documento, titulada «Quién sois, qué hace y qué ofrece», el obispo también agradece el esfuerzo y el trabajo realizado por los catequistas, a pesar de las dificultades actuales en todo el mundo para mantener un buen número de inscritos año tras año. La presencia de Vida Creixent ayuda a trabajar la fe en grupos de personas mayores. Por otra parte, Cáritas la Garrotxa, –afirma el obispo– es una entidad bien organizada y con un número importante de voluntarios que desempeñan un papel muy importante en la atención de los más necesitados de aquellas comarcas. Constata que hay un buen grueso de personas que colaboran en el servicio de pastoral de la salud, atendiendo a los enfermos en diversas residencias y centros de salud. El obispo también agradece la labor de un buen número de laicos comprometidos con la atención a las parroquias y que en algunos casos se responsabilizan de las celebraciones en ausencia de presbítero.
En una segunda parte del documento, el obispo también ofrece algunas indicaciones pastorales en forma de objetivos de cara al futuro. En este sentido, hace referencia por ejemplo a la creciente importancia del catecumenado y de la formación permanente; en la catequesis de adultos; a la necesidad de estar siempre dispuestas y en contacto permanente con las escuelas cristianas presentes en el arciprestazgo, donde se concentran gran parte de los jóvenes y de los niños; y en la constitución de equipos pastorales, entre otras cuestiones.
Este 2018, el arciprestazgo del Montgrí – La Bisbal, toma el relevo en el Alt Fluvià, y el obispo ya ha iniciado su visita pastoral a varias parroquias, donde habitualmente preside la eucaristía dominical y mantiene encuentros con los feligreses y los miembros de los consejos parroquiales.