Con motivo de la festividad de San Sebastián (20 de enero), Tossa y Santa Coloma de Farners vivieron, un año más, una de las fiestas destacadas de su calendario. Los actos empezaron el viernes 11 con el inicio de la Novena en el santo y cerraron con el Peregrino, que este año contó con 1.067 acompañantes, que hicieron la tradicional peregrinación de los 40 km que separan las dos poblaciones. El obispo Francisco recibió al Padre Peregrino de este año -Jordi Ribas, de 46 años- a la entrada de la capital selvatana, al que siguió una procesión hasta la capilla de San Sebastián para cumplir el voto ancestral. Al día siguiente se emprendió el camino de vuelta para anunciar a los cerros que se había renovado la promesa.