
Este domingo, 14 de febrero, tendrá lugar la colecta con motivo de la Jornada de Manos Unidas, la ONG de la Iglesia que trabaja para erradicar el hambre en el mundo. Lo hace, como cada año, mediante proyectos de desarrollo en países del Tercer Mundo que permitan superar ese hambre, no sólo de alimento, sino también de otras necesidades. El lema de esta edición de la campaña es “Contagia solidaridad para acabar con el hambre”. La situación derivada de la pandemia ha hecho que este año la asignación de los proyectos esté condicionada, y sólo se ha podido asignar a Girona un proyecto de presupuesto medio y uno más elevado que tendrán que asumir doce arciprestazgos.
Mejora de la educación primaria de calidad en Livingstone (Zambia). Las Hermanitas de San Francisco han presentado este proyecto para la escuela que tienen desde hace 11 años en esta ciudad de cien mil almas. Es un centro de dos niveles: tres aulas de primaria y dos de infantil. Los necesita una más de este nivel, una para el grado 7 y una biblioteca. El presupuesto de la obra es de 20.700 euros. El 16% será aportado por los beneficiarios y el resto corresponderá al arciprestazgo del Montgrí - la Bisbal.
Mejora de las condiciones de vida de 600 familias en la región de Mbarara (Uganda). En esta zona del sur de ese país, Manos Unidas ya ha llevado a cabo varios proyectos que, como éste, se coordinan con la Cáritas local. El proyecto se llama “Formación y equipamiento en seguridad alimentaria, técnicas agrícolas, sanidad e higiene y nuevas actividades laborales”. Se llevará a cabo en tres años. Tiene un presupuesto de 95.000 euros, con un 8% de aportación local. La responsable es Catherine Kamuslime, de Cáritas Mbarara. Dado el elevado presupuesto, se distribuye entre todos los arciprestazgos del Obispado excepto el del Montgrí - la Bisbal.