
Una “felicitación llena de esperanza”. Ese fue el deseo por estas fiestas de Navidad del obispo Francisco al personal de las oficinas del Obispado de Girona, en un acto celebrado ayer jueves, 23 de diciembre, a mediodía, en la sede diocesana. El vicario general, Mn. Luis Suñer, hizo su introducción y se refirió al mensaje navideño que se puede leer en el evangelio de Lucas: “Gloria a Dios en las alturas y paz en la tierra a los hombres de buena voluntad”. "El niño Jesús nos transmite el deseo de la paz que debemos transmitir a los demás", señaló.
En su intervención, el obispo Francisco explicó que "el nacimiento de Jesús se produce en un momento histórico como el que vivimos actualmente, un momento difícil pero también lleno de esperanza". Asimismo, agradeció el esfuerzo que lleva a cabo por el personal de la Curia por mantener al día los servicios diocesanos, al tiempo que no escondió cierta inquietud por el compás de espera en su relevo episcopal. Sin embargo, se mostró esperanzado por salir de la crisis económica y sanitaria. Finalizó su felicitación con esta voluntad "llena de esperanza", desde esta diócesis especial, como la ha definido recientemente un conocido semanario católico. “Estoy de acuerdo, tenemos nuestras peculiaridades y es así como debemos amarlo y es así como el obispo os ama”, zanjó.