Cáritas Diocesana de Girona ha presentado la memoria correspondiente a la acción social llevada a cabo por la entidad durante el año 2015. El acto ha tenido lugar esta mañana en la sede de los servicios generales en Girona. El obispo de Gerona, Mons. Francesc Pardo, el director de Cáritas Diocesana de Gerona, Ramon Barnera, y el secretario general de la entidad, Martí Batllori, han hecho públicos los datos más destacados.
Cáritas Diocesana de Girona ha atendido a más de 23.000 personas durante el año 2015 y casi 60.000 se han visto beneficiadas por sus 44 proyectos de acción social y 277 servicios llevados a cabo por las 48 Cáritas repartidas por toda la diócesis de Girona. La entidad, que actualmente cuenta con 2.498 voluntarios y más de 100 profesionales, ha invertido 7.413.402€ en mejorar la calidad de vida de las personas que viven en situación o riesgo de exclusión social.
Aumento de la pobreza severa Los datos de la memoria presentada constatan hoy en primer lugar el aumento constante de la pobreza severa. El 40% de las personas atendidas por la entidad no dispone de ningún ingreso regular y crece dos puntos respecto al último ejercicio. Además, un 70% de las familias que reciben soporte de Cáritas tienen menores a cargo. Precisamente, el aumento de la pobreza infantil es una de las preocupaciones de Cáritas Diocesana, que alerta también de que la pobreza se hereda entre generaciones, como demostró el último informe FOESSA, presentado hace unas semanas. El 40% de las personas atendidas durante el 2015 ya fue atendida el año anterior. Este dato refuerza la tesis de la cronificación de la pobreza.
En este sentido, Ramon Barnera, Director de Cáritas, ha afirmado que "hasta que no disminuya el nivel de paro, será muy difícil luchar contra la cronificación de la pobreza". Martí Batllori, secretario general, ha reivindicado la necesidad de disponer de una renta mínima garantizada y de luchar por conseguir trabajos dignamente retribuidos que contribuyan a poder vencer la exclusión social y dejar de ser "trabajadores pobres".
El ámbito laboral es una de las principales preocupaciones de Cáritas y centra gran parte de los esfuerzos de los programas de la entidad. Una de cada cuatro personas atendidas en los programas laborales de la entidad ha logrado una inserción laboral, tal y como detalla la memoria. La presentación de la memoria también ha servido para presentar las actividades de Ecosol Empresa de Inserción, que actualmente ya ha generado 50 puestos de trabajo para personas en riesgo de exclusión.
El obispo Francesc Pardo, por otra parte, ha destacado la importancia de disponer de “datos
objetivas” sobre la situación social actual de pobreza y marginación”, al margen de las opiniones e ideologías y ha emplazado a los voluntarios y profesionales a seguir “trabajando con amor” para las personas que viven en situaciones de exclusión.
Aumento de la exclusión entre las personas mayores El 15% de las personas atendidas por Cáritas durante 2015 tienen más de 60 años. El 78%
tienen más de 80 años y el 72% de estas personas viven solas. Precisamente, para paliar la situación de soledad y los riesgos que genera esta situación, Cáritas apuesta por desarrollar programas y servicios como Apadrinar a un abuelo o Ser mayor en dignidad.
Los retos de la entidad Los principales retos de la entidad son fomentar el alquiler social para garantizar el derecho a
la Vivienda, luchar para el trabajo digno para salir de la pobreza, trabajar para erradicar la
pobreza familiar a partir de intervenciones integrales y defender los ingresos mínimos garantizados a través de una renta mínima de inserción.
Puede consultar la Memoria 2015
aquí.
