
Durante el año 2022 los Mossos d'Esquadra recibieron un total de 12 denuncias por robo en centros de culto y ermitas de la Diócesis de Girona, un 45% menos que el año anterior, cuando la cifra fue de 22. Estos son los datos que se presentaron ayer lunes, 6 de febrero, en el marco de la reunión de seguimiento establecidas por el plan de prevención de robos en los más de 1.100 templos del territorio.
Desde su despliegue y puesta en marcha en 2010, el dispositivo ha permitido reducir considerablemente las incidencias gracias al contacto fluido entre las diferentes comisarías y los diferentes arciprestazgos. También se valora especialmente el asesoramiento y los consejos de seguridad en las parroquias sobre nuevas estafas, así como la difusión de campañas.
En la reunión participaron, por parte del Obispado, el administrador diocesano, Mn. Lluís Suñer; la secretaria técnica de Patrimonio Cultural, Mª Antònia Clarà, y el delegado de Medios de Comunicación, Xavier Roca; y por parte de los Mossos, el comisario jefe de la Región Policial de Girona, Josep Milan; la catoral Mercè Vidal y el agente Marta Pla.