
Este año se cumple el 30 aniversario de la muerte del P. Joaquim Vallmajó i Sala, asesinado en Ruanda víctima de la guerra y de las matanzas entre tutsis y hutus en los grandes lagos africanos. Nacido en Navata en 1941, estudió filosofía y teología en el Seminario diocesano de Girona, y entró en el noviciado de los Misioneros de África, conocidos como los padres blancos, en Gap (Alpes franceses). En 1965 fue ordenado presbítero en Girona y enviado como misionero a Ruanda, donde permaneció en dos etapas, hasta su muerte.
En el Empordà, su tierra natal, y en otros lugares, se están llevando a cabo una serie de actos con motivo de esta conmemoración. El viernes 19 de abril se hizo un homenaje a la plaza de la Solidaridad de Figueres, donde hay un monumento dedicado a Joaquim Vallmajó y Joan Alsina, misioneros ampurdaneses. Y este pasado viernes, 26 de abril, fecha de su muerte, se celebró una misa en su memoria en la iglesia de Sant Pere de Figueres, un acto en la escuela de Navata -el pueblo donde nació Vallmajó-, y una mesa redonda en La Cate de Figueres con varios testigos que tuvieron contacto directo con él. Por otro lado, también se ha editado un libreto, titulado "Joaquim Vallmajó, 30 años buscando Justícia", que es una recensión de la obra de Josep Valls "África en el corazón", del año 2012.
Según los organizadores de estos actos, "la intención de esta conmemoración, además del recuerdo, es que el pensamiento, el testimonio y las causas de Quim Vallmajó perduren entre nosotros y orienten el compromiso de cara al mundo actual".
El programa de actos seguirá en Arbúcies, Figueres y Girona, con el siguiente programa: