Este pasado viernes, 3 de mayo, fray Octavi Vilà, obispo de Girona, presidió la celebración del oficio de la Santa Cruz en la iglesia parroquial de Sant Pere de Figueres. Durante la homilía afirmó que «la cruz es algo más que un símbolo, más que un logotipo, que diríamos hoy» y se preguntó «¿cómo puede ser que un símbolo de muerte, es más de una muerte infame, se haya convertido para nosotros en un símbolo de vida?». «De ese árbol, en el que todo parece hablar de derrota, surge la victoria de la vida sobre la muerte, de la justicia sobre la injusticia, de la libertad sobre la esclavitud», respondió.
«La gran lección de la cruz no es el sufrimiento por el sufrimiento, es el amor que hay detrás de ese sufrimiento», remarcó. Y añadió: «Mirar la cruz, mirar al crucificado es mirar el dolor de la humanidad, que no es genérica, que tiene rostros concretos».
(Puede consultar la homilía completa aquí)
Por otra parte, y con motivo de los 50 años de Cáritas en el Alt Empordà, por la tarde tuvo lugar, en la misma iglesia, un montaje con velas en beneficio de la entidad, acto coordinado por Bruno Pérez Juncà y Ceres Roura.
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