
Ayer lunes, 10 de junio, por la noche, se cerró en el Seminario de Girona el curso académico 2023/24 del Instituto Superior de Ciencias Religiosas de Girona. El programa comenzó con la Celebración de la Palabra en la iglesia, que fue presidida por el obispo de Girona, fray Octavi Vilà, concelebrada por el director del Instituto, Mn. Josep Casellas, asistido por el diácono Mn. Joan Puig. Se reunieron profesorado, alumnos, exalumnos y amigos del centro educativo.
En la homilía, el obispo pidió cuidar y enriquecer nuestra fe: «Las formas de hacerlo son múltiples, ninguna excluyente y todas ellas complementarias. En primer lugar, tenemos la oración, que nunca debemos descuidar; oración personal y oración comunitaria. En segundo lugar, tenemos el contacto directo con la Palabra de Dios, un pozo de donde brota siempre agua fresca, un agua como aquella que Jesús prometía a la samaritana, un agua de la que quien beba nunca más tendrá sed, porque se convertirá dentro de él en una fuente de donde brotará vida eterna». Invitó a combinar esta fe con el estudio «y aquí, en este campo, la filosofía y la teología tienen un gran papel. La fe no es producto de nuestro intelecto; ciertamente, la fe es un don, un regalo de Dios. Pero precisamente porque es un regalo tenemos que cuidarlo, hay que cuidarlo, que procuremos que dé siempre frutos», señaló. También destacó el papel de los teólogos como pioneros del diálogo de la Iglesia con las culturas, "que debe favorecer la acogida de la Palabra de Dios por parte de los hombres de todas las naciones, razas, pueblos y lenguas".
Seguidamente, en el Aula Dr. Estela del Seminario, el profesor Jordi Bohigas, doctor en Historia, pronunció una conferencia titulada "San Martín Sacosta: de canónica a Seminario". Repasó la historia del edificio del Seminario desde sus orígenes, primero como iglesia románica, de la que se conservan algunos elementos. Sucesivamente, se convertiría en una de las primeras parroquias de la ciudad que, posteriormente, se organizaría como canónica (comunidad de canónigos) entre los años 1164 a 1581, cuando con la llegada de la primera comunidad de los jesuitas acogería un centro docente de gran nivel. A continuación, se convertiría en cuartel y, finalmente, en el transcurso del siglo XX, seminario. También hizo memoria del dr. Estela, que fue rector, y del doctor Joan Busquets, así como de algunos alumnos notables.
Cerró el acto el obispo Octavio, quien destacó el sentido y papel que los seminarios han tenido, no sólo en las respectivas diócesis, sino también en la cultura y la sociedad catalana. Por último, agradeció al claustro de profesores del Instituto ya los alumnos el trabajo realizado durante el curso.